Lo primero que hay que hacer después de aprender qué son los mapas mentales es empezar a construir uno tú mismo. No será eficaz si te limitas a meter información, y debes saber cómo crear correctamente un mapa mental para obtener los mejores resultados posibles.
En este artículo, te explicaremos cómo crear un mapa mental y desglosaremos cada paso para que puedas crear uno fácilmente.
Si no conoces los mapas mentales, aquí tienes una breve definición extraída de nuestra completa guía: Un mapa mental es una herramienta visual sencilla que ayuda a organizar las ideas en una estructura secuencial fácilmente comprensible. Se puede utilizar para captar diferentes ideas y mostrar su relación, organizándolas al mismo tiempo de forma que no desordenen ni desorienten el cerebro.
How To Create a Mind Map
Los mapas mentales se utilizan sobre todo para tomar notas, resolver problemas o desglosar un concepto complicado. Resultan útiles en estos casos porque crean una estructura que esquematiza relaciones complejas de forma que la información resulte muy accesible.
Ahora que ya tenemos una idea de lo que son los mapas mentales y por qué se utilizan, he aquí nuestro resumen de cómo crear un mapa mental.
Elemento central
El mapa mental comienza ideando un elemento central al que seguirá el resto del mapa. Este elemento central es fundamental para el resto del mapa mental y debe ser un gran paraguas para dar cabida a tantas ramas detalladas como sea posible.
Los mapas mentales son documentos que se expanden hacia el exterior, de modo que el elemento central será la idea central en la que basarás el resto de tu mapa.
Puedes hacer un mapa mental a partir de casi cualquier información, pero si necesitas por dónde empezar, prueba a pensar en un problema que esperas resolver, un tema complejo que quieres desglosar o una larga lista de notas que quieres organizar.
Pensar en estos temas puede ser útil si no estás seguro de por dónde empezar y puede servirte de base para un gran mapa mental.
Otro buen lugar para utilizar un mapa mental es una sesión de lluvia de ideas con tu equipo; en este caso, colocarás el proyecto a nivel macro en el centro y tu equipo empezará a hacer contribuciones que se ramifican hacia fuera. Con el tiempo, éstas se ramificarán en tareas o soluciones específicas que podrán llevar a cabo para hacer avanzar el proyecto.
Por ejemplo, si estás creando un mapa mental intentando determinar qué disfraz de Halloween ponerte, el elemento central serán los disfraces de Halloween. Todo el mapa gira en torno a esto y deja mucho espacio para interpretar otros tipos de trajes más adelante.
Asociaciones de primer nivel
El siguiente paso al crear un mapa mental es construir el primer nivel de asociaciones. Estas asociaciones serán los subtemas más básicos relacionados con el concepto principal y comenzarán a organizar la información dentro del mapa mental.
Las asociaciones de primer nivel son fundamentales para la integridad del mapa mental y demostrarán la dirección que quieres tomar. Si bien estas asociaciones deben proporcionar la dirección para su mapa, también deben ser grandes cubos para establecer las diferencias entre cada camino.
Disponer de grandes cubos de ideas ofrece un amplio margen para la interpretación, lo que te permite llevar tu mapa mental en muchas direcciones diferentes.
En nuestro ejemplo de los disfraces de Halloween, las asociaciones de primer nivel podrían ser disfraces divertidos, disfraces terroríficos y disfraces de personajes. Todos ellos son cubos que ayudan a centrarse en qué disfraz llevar y permiten ampliar los diferentes disfraces específicos.
Otras asociaciones
Después de desarrollar varias asociaciones de primer nivel, puede empezar a descender por las ramas para crear más asociaciones a lo largo de la línea. Éstas serán asociaciones de segundo, tercer y cuarto nivel y continuarán a medida que siga desarrollando su mapa.
Las nuevas asociaciones que cree reducirán cada vez más el enfoque del mapa, así que, a medida que las vaya creando, piense en cómo se relacionan con el elemento central con el que empezó el mapa. Estas nuevas asociaciones continuarán hasta que se le agoten las valiosas conexiones que puede establecer entre las ideas.
Además, no conviene entrar en detalles demasiado deprisa, porque entonces no tienes adónde ir y los niveles de tu mapa podrían no estar correlacionados entre sí. Para evitarlo, asegúrese de crear niveles de igual importancia y relevancia a medida que avanza por el mapa, en lugar de dispersar la información a medida que avanza.
Volviendo a nuestro ejemplo de Halloween, nos aseguramos de mantener los tipos de disfraces en el mismo nivel en lugar de poner disfraces de miedo y disfraces de sándwiches de frutas y verduras en el mismo nivel, porque tienen ámbitos completamente diferentes. A medida que avanza el ejemplo, puede empezar a colocar ideas de disfraces individuales en sus cubos correspondientes.
Integrar elementos de diseño únicos
Lo último que hay que hacer para crear un mapa mental es integrar elementos de diseño únicos. Este no es necesariamente el último paso del proceso y puede hacerse a lo largo de todo el proceso, pero puede ser útil tener toda la información trazada antes de empezar a crear diferencias de diseño entre las distintas ramas.
Estas diferencias de diseño podrían consistir en distintos colores de cada línea, distintos resaltes alrededor de los elementos, distintos pesos del texto o incluso imágenes para representar los elementos.
Cuando se utilizan imágenes, puede ser útil pensar en cómo integrar el pensamiento de diseño en el mapa y mejorar aún más la capacidad de comprensión de la información.
Los elementos de diseño únicos no sólo tienen un propósito visual, sino que también ayudan a denotar los diferentes caminos que toma tu mapa mental y cómo la información es diferente. Al crear distinciones visuales, incorporas otra capa de información al mapa mental y creas otro nivel de organización para tus pensamientos.
Reorganiza tu mapa fácilmente
El último punto que debes recordar al crear un mapa mental es el hecho de que puedes reorganizar fácilmente los elementos del mapa en cualquier momento.
Los mapas mentales son plantillas increíblemente flexibles que pueden manipularse fácilmente para reflejar cambios en la estructura de la información.
Es importante reordenar el mapa para cuestionar la relevancia de las asociaciones y, posiblemente, cambiarlas de categoría.
Esto demuestra que los mapas mentales son una estructura muy flexible que puede manipularse con gran eficacia para reflejar el estado exacto de las relaciones dentro de su conjunto de información.
Más información: ¿Qué es un mapa mental?
Conclusión
Tanto si los utilizas para organizarte como para analizar, los mapas mentales son una gran herramienta para ampliar tus conocimientos sobre conceptos y relaciones complejas. Esperamos que esta guía te haya sido útil, y si quieres aprender más sobre otras aplicaciones de pizarras online, echa un vistazo a nuestro reciente post en el blog TryMyUI sobre pizarras online y experiencia de usuario.